Fue
No fue la nieve
sino los tiritones de la tarde.
Ni nuestros pies mojados,
sino la piel,
y el color de tus ojos.
Las manos que, nerviosas
pretendían apresar
algo tan invisible.
Fue el tiempo
detenido en tus labios.
Fueron las sombras
que apuñalaban.
Y una voz amiga,
y un dedo que acaricia,
y una uña que rompe
cada frontera.
Fue
hoy sé que fue
a pesar de la niebla.
Eso de la uña que rompe cada frontera... jolín, cómo me gusta.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracia
Me encanta. Un beso
ResponderEliminarNieves
Si eres tan gran mujer, madre y ser humano como poeta, voy a esta encantado de conocerte. Nos vemos el sábado. Amando.
ResponderEliminarGracias a los tres por vuestros comentarios. Da mucho ánimo para seguir escribiendo. Sobre todo cuando los halagos vienen de tres pedazos de escritores.
ResponderEliminarNos vemos
Sencillo, profundo y evocador. ¡Un gran poema! Un beso
ResponderEliminarQué bonito Paula... y sabes que la poesía no es lo mío.
ResponderEliminarUn supersaludo