Personas que irradian luz
Hay gente que irradia luz, y cuando tienes la suerte de compartir tiempo y espacio con una de esas personas, es inevitable que te ilumine.
Si en lugar de eso, tu suerte se multiplica y se te da la ocasión de compartir tres días, no con una, sino con un grupo numeroso de personas extraordinarias (con toda la carga etimológica y emocional de la palabra extraordinaria) los efectos de esa luz deben continuar flotando durante bastante tiempo.
He disfrutado de un regalo que no se puede pagar ni agradecer de ninguna manera. Durante estos tres días en Ayna, he recibido sonrisas, cercanía, amabilidad, cariño, he reído, me he emocionado, he disfrutado como una niña, y he abierto una puerta que, estoy segura, ha de despertar muchísimas más sensaciones de lo que imagino.
No quiero que esta paz, la sensación de descubrimiento y de amanecer que me traigo de este curso, se quede en nada aplastada por la rutina del día a día.
Me he traído la energía y la luz que irradiabais. Me he contagiado de vuestra serenidad. Y no voy a perderlas.
Si en lugar de eso, tu suerte se multiplica y se te da la ocasión de compartir tres días, no con una, sino con un grupo numeroso de personas extraordinarias (con toda la carga etimológica y emocional de la palabra extraordinaria) los efectos de esa luz deben continuar flotando durante bastante tiempo.
He disfrutado de un regalo que no se puede pagar ni agradecer de ninguna manera. Durante estos tres días en Ayna, he recibido sonrisas, cercanía, amabilidad, cariño, he reído, me he emocionado, he disfrutado como una niña, y he abierto una puerta que, estoy segura, ha de despertar muchísimas más sensaciones de lo que imagino.
No quiero que esta paz, la sensación de descubrimiento y de amanecer que me traigo de este curso, se quede en nada aplastada por la rutina del día a día.
Me he traído la energía y la luz que irradiabais. Me he contagiado de vuestra serenidad. Y no voy a perderlas.
Por lo que veo has regresado de Aýna con las pilas cargadas. Me alegro que te haya sentado tan bien.
ResponderEliminarBesos
Nieves
Muchas gracias a tí, Paula, que has sido un contacto extraordinario en nuestro curso: el hotel, ... la pequeña complicidad con la navaja (jejejeje, tú ya me entiendes. Y tu visita al taller con Jose Luis Cuerda ;-), menos mal que la gente se creyó el bulo ese de que era un doble ... que si no nos la lían en Aýna... jejejeje.
ResponderEliminarTe contesto en nombre de AGHA y te doy las gracias por tu presencia, por estas palabras tan cariñosas y por compartir contigo tan buenos momentos.
Ójala esto nos sirva para seguir y compartir más momentos.
Un beso. Toñi
Seguro que te los pasado muy bien y estás que te sales.
ResponderEliminarUn beso.
Alicia.
Gracias compañeras,
ResponderEliminarNieves, sí he venido con las pilas a tope y con una enorme sonrisa que me hacía mucha falta.
Toñi, gracias a ti por descubrirme estas cosas tan estupendas. Y sí, ojalá esto solo sea el principio de muchas más experiencias.
Alicia, tienes razón, estoy que me salgo jajajaja. Y me encanta.
¿Le decimos a padre que haga otro curso ya? jajaja, nos mata... Me alegro de que hayas regresado tan bien, creo que has expresado cómo andamos un poco todo. Gracias por compartir estos días y por ponerle palabras a los sentimientos. Un abrazo grande, Paula!
ResponderEliminarMe alegro de que te lo hayas pasado tan bien y llegues renovada, me da envidia pero de las buenas eh? Un abrazote :)
ResponderEliminarUn abrazo a ti también Llanos. Eres de esas personas cargadas de energía positiva, y tienes el don de contagiarla.
ResponderEliminarMe ha hecho ilusión que te pases por aquí.
Nos leemos.
Ana, creo que tú también has disfrutado mucho de tu viaje a Disney ¿verdad?
La verdad es que he cargado las pilas como nunca, y espero no desinflarme por el momento, porque he pasado un año rarillo y creo que ha llegado la hora (como decía el otro día en twiter) de ir soltando lastres.
Un beso muy grande.
La luz no solo emana de las lámparas; también brilla desde el interior de las personas. Cada sonrisa, cada acto de bondad, ilumina el mundo de una manera que ninguna bombilla podría igualar.
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